NUEVA YORK._ “Me quise morir al enterarme por las noticias de que mi hijo está acusado de ser un terrorista”, dijo el padre de José Pimentel, imputado por las autoridades locales de planear ataques a estaciones policiales y asesinar soldados que regresan de la guerra, además de policías locales. En declaraciones al noticiero del canal 41 de la cadena Univisión, el señor Juan José Pimentel dijo desde República Dominicana que se mostró muy sorprendido al conocer la información acerca del arresto y acusaciones contra su hijo. “El comportamiento que tiene él y como se ve en la televisión, parece que la mente se le ha transformado y el hermano me dice que ni con el abogado quiere hablar”, sostuvo el padre.
“Cuando vi que salió en primera plana en todos los periódicos que es un terrorista y Nueva York revoltiao, dije ¿cómo va a ser? y me dieron deseos de hasta de morirme”, relató el señor Pimentel.
Nuevas versiones surgieron este jueves acerca de la situación del presunto terrorista, cuando el New York Times publicó en su edición de hoy que la policía local insiste en que el dominicano estaba “listo” para atacar las edificaciones que tenía en mente, pero la uniformada no le halló ninguna lista ni mapa, generalmente usados por los terroristas.
El matutino local reportó que la policía alega que tuvo que actuar a pesar de que el FBI nunca consideró a Pimentel como una amenaza seria para la seguridad de la ciudad y el país.
El Times dijo que Pimentel tenía poco dinero, no podía pagar la factura de su teléfono móvil, pero consiguió unos dólares para comprar los codos de los tubos, el reloj y los bombillitos navideños con los que fabricó las “bombas” caseras.
Tuvo inconvenientes para hacer los orificios en los codos, por lo que buscó la ayuda de un vecino que resultó ser el informante encubierto de la policía. El FBI, añade el medio, tenía su propia investigación paralela a la de la policía, mientras la uniformada construía el caso.
“Existe la preocupación de que el informante pudo haber jugado un papel activo en ayudar a Pimentel y varias otras personas conocían de ello”, añade el reportaje. El Times también cita que las relaciones entre el FBI y la policía de Nueva York se han tornado tensas por este caso.
Los fiscales dicen que tienen un caso fuerte contra Pimentel y que por el cargo de posesión criminal de un arma para cometer actos terroristas, podría ser sentenciado a 25 años en la cárcel a cadena perpetua si es declarado culpable.
Paul Brown, portavoz de la policía le dijo al periódico que hay gente anónima que desconocen el caso, pero están tratando de socavarlo. “Las palabras y acciones del sospechoso hablan por sí mismas”, dijo Brown.
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