NUEVA YORK.- Las autoridades policiales y la fiscalía criminal de Manhattan, incautaron en allanamientos $1 millón de dólares en efectivo, joyas, drogas y armas de fuego al dominicano Ceferino Pérez a quien junto a su esposa, acusan de ser los presuntos líderes de una poderosa banda de narcotraficantes que operaba en el Este de Harlem. Los fiscales dijeron que Pérez tenía como base el negocio “Bobby Electronics”, del cual el acusado figuraba como propietario y presidente.
Las autoridades, que además arrestaron a otros 21 supuestos narcos en el Este de Harlem, involucran también a la esposa del imputado, Elsie Detres Pérez, como cómplice principal de las operaciones de su marido.
Las autoridades dijeron que grabaron docenas de conversaciones telefónicas a Pérez y en una de ellas, le da instrucciones a la esposa, de cómo empacar la droga para que el polvo narcótico quede en el fondo.
La mayoría de sus clientes están ubicados en la calle 95 Este, entre las avenidas Primera y Segunda. Los fiscales sostienen que Pérez era meticuloso embolsando y distribuyendo la droga. La mujer, se declaró culpable la mañana de ayer jueves en Corte Suprema de Manhattan por conspiración para traficar psicotrópicos. El juez Edward McLaughin le impuso una fianza de $150.000 dólares. 1.500 bolsas de cocaína eran empacadas diariamente por los integrantes de la banda dirigida por Pérez.
La fiscalía dijo que el dominicano era un jefe muy práctico dirigiendo su banda y que personalmente se encargaba de distribuir cocaína al por mayor. Otros acusados son Nelson Rejab y Ramón Torres (El Ratón). Pérez y sus cómplices se buscaban hasta $80.000 dólares al día.
El negocio de Pérez, repartía tarjetas falsas, cuyos números eran marcados por sus clientes adictos para recibir la droga. El acusado principal respondía personalmente el teléfono para tomar las órdenes, según la acusación.
Una de las conversaciones entre Pérez y su esposa, fue grabada por las autoridades el 31 de marzo. “Cuando lo agarre, ¡bang!”, le dijo el dominicano a su mujer en referencia a un hombre no identificado del que creía trataba de alterar la droga que era empacada con sellado a calor en las bolsitas plásticas para evitarlo.
En allanamientos hechos al negocio y residencias de varios de los acusados, se confiscaron $1 millón de dólares en efectivo, joyas de oro, drogas y armas de fuego. Los valores los guardaba en diferentes cajas de seguridad con depósitos seguros.
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