NUEVA YORK - El Fiscal General Eric T. Schneiderman anunció hoy que ha tomado acción en una corte federal para defender el derecho de Nueva York a proteger sus vías acuíferas de la contaminación biológica – que resultada del vertimiento de agua que contienen especies no nativas a un nuevo sistema de agua.
Las especies no nativas o invasoras, son transportadas en buques comerciales y perjudican la pesca comercial y recreativa, incluso en los Grandes Lagos, el Estrecho de Long Island y el río Hudson, lo cual cuesta miles de millones dólares al estado y el país.
"Las aguas de Nueva York son los recursos vitales, directamente vinculados a la salud de nuestra economía ", dijo el Fiscal General Schneiderman. "Todo lo que amenaza la sostenibilidad de nuestras vías fluviales reduce su valor económico, recreativo y medioambiental.
Los intereses corporativos, que buscan quitarnos el derecho a proteger nuestras vías fluviales serán confrontados, y mi oficina seguirá luchando para mantener a nuestras vías fluviales seguras para todos los neoyorquinos y fuertes para nuestra economía".
El Fiscal General presentó una moción ‘amigo-del-tribunal’ en la Corte de Apelaciones de EE.UU. para el Distrito de Columbia el martes en defensa de las restricciones que Nueva York agregó al permiso nivel nacional expedido por la Agencia de Protección Ambiental (EPA). Estos permisos y restricciones de Nueva York, limita las especies invasoras en las aguas de lastre de los buques comerciales habitualmente descargan en los cuerpos de agua en que viajan.
Las especies invasoras - como el mejillón cebra, el gobio redondo, y la septicemia hemorrágica viral (VHS), virus, que se han introducido en las aguas de Nueva York – provocando la extinción de especies nativas, dañando la pesca comercial y recreativa. A diferencia de la contaminación química, la contaminación biológica de las especies invasoras tiende a la auto-replicación, por lo que el problema se agrava con el tiempo.
Un puñado de organismos liberados en agua nueva es capaz de reproducirse y colonizar amplias zonas de las aguas adyacentes. A través de la depredación y la competencia directa por los recursos, estos invasores resistentes degradan el hábitat, interrumpen las cadenas de alimentos, y amenazan la salud humana.
El permiso a nivel nacional de la EPA establece límites sobre el número de especies invasoras que pueden ser arrojadas con las aguas de lastre, una restricción específicamente añadida por Nueva York para asegurar las aguas del estado estén debidamente protegidas de contaminación biológica. La moción del Fiscal General sostiene que la ley federal de Agua Limpia Ley obliga a la EPA a incluir controles adicionales de los Estados a su permiso de todo el país.
En Nueva York, las especies invasoras representan una amenaza significativa para el valor ambiental, recreativo y económico en varios lugares. Por ejemplo:
Los Grandes Lagos ahora contienen más de 180 especies no nativas, como el notorio mejillón cebra y otros organismos invasores que han alterado radicalmente el ecosistema nativo. El establecimiento de especies invasoras en los Grandes Lagos ha resultado en pérdidas económicas anuales estimadas en $ 5,7 mil millones.
Más de 50 especies no nativas y 40 especies de origen desconocido han sido identificadas en el estrecho de Long Island. La presencia de estas especies puede resultar en significativos costos ecológicos, socioeconómicos y de otro tipo, incluidos los daños a la pesca comercial y recreativa que se estima contribuye en más de mil millones para las economías locales
Uno de los más valiosos recursos naturales de Nueva York - el río Hudson - está infestado con más de 100 especies no-indígenas. Se estimó en 2005 que el impacto ambiental y económico de la contaminación biológica del canal y los sistemas del río Hudson en el Estado de Nueva York es de casi $500 millones por año.
El Dr. David L. Strayer, Científico Principal en el Instituto de Estudios Ecológicos Cary, dijo, "Especies descuidadamente transportadas alrededor del mundo en el agua de lastre de los buques oceánicos ahora están en muchas de las aguas de Nueva York, incluyendo los Grandes Lagos, el Rio Hudson, y nuestras aguas costeras. Estos invasores dañan nuestros ecosistemas y nos cuestan millones de dólares cada año.
La acción por del Fiscal General de Nueva York para cerrar el ‘Agua de Lastre Expreso' es un paso importante para salvaguardar los recursos naturales de nuestro estado para las generaciones futuras e impide que se nos deje la factura por los daños causados por los invasores del futuro del agua de lastre".
Thomas Marks, Director del Concejo de Pesca Deportiva de los Grandes Lagos, dijo: "Aplaudo las acciones del Fiscal General Schneiderman de continuar la lucha legal para defender el derecho de Estado de Nueva York a establecer los límites numéricos sobre la cantidad de especies invasoras que pueden llegar con el vaciado en las aguas de lastre.
Los grandes esfuerzos relacionados con vaciados de aguas de lastre son necesarios para detener la invasión de nuestros ecosistemas acuáticos preciosos. Con acción continua del Fiscal General, Nueva York está marcando el estándar por el cual todas las aguas pueden ser protegidas”.
Adrienne Esposito, Directora Ejecutiva de la Campaña Ciudadana para el Medio Ambiente, dijo: "Aplaudimos al Fiscal General Schneiderman por la defensa de las importantes masas de Nueva York de los graves daños causados por las especies acuáticas invasoras.
Las especies invasoras en el Estrecho de Long Island, tales como ascidias, Cangrejo de la Costa Asiática y la Ostra Plana Europea está disminuyendo nuestros moluscos nativos y las poblaciones de peces, y perjudicando los muelles y cascos de los barcos. Requerir que los buques que naveguen en aguas de nuestro estado está libre de polizontes acuáticos protege la pesca nativa, importante infraestructura, y nos ahorra dinero".
David "Woody" Woodworth, Presidente de la Asociacion Southtown’s Walleye, dijo: "Es imperativo que protejamos nuestros Grandes Lagos de especies invasoras objeto arrojadas por el agua de lastre de los grandes buques comerciales.
El Fiscal General Schneiderman debe ser elogiado por sus esfuerzos en limitar el vertido de aguas de lastre, que ha aumentado considerablemente la contaminación de nuestros lagos con las especies invasoras. Nueva York y otros estados que tratan de proteger sus vías navegables deben tener el derecho a establecer controles para detener la contaminación de nuestras aguas por grandes buques que vierten el agua de lastre contaminada. "
Esta es la más reciente acción del Fiscal General para promover la salud, la seguridad y el bienestar económico de Nueva York. En enero, se presentó una demanda contra una central eléctrica con sede en Pennsylvania por violar la Ley de Aire Limpio y amenazar la calidad del aire de Nueva York.
Schneiderman también lideró una coalición de abogados generales del estado para pedir a la Cámara de Representantes de EE.UU. de mantener las regulaciones ambientales que protege a los neoyorquinos de mercurio y otras sustancias tóxicas peligrosas para la salud humana y el medio ambiente.
El caso está siendo manejado por la Fiscal Asistente Timoteo Hoffman, el científico ambiental el Dr. Raymond Vaughan y la Sub Jefa de la Oficina de Proteccion Ambiental del la Fiscalía General, Lisa Burianek, junto con la Sub Fiscal General Denise Hartman y la Consejera Especial de la Solicitadora General, Alison Nathan.
"Las aguas de Nueva York son los recursos vitales, directamente vinculados a la salud de nuestra economía ", dijo el Fiscal General Schneiderman. "Todo lo que amenaza la sostenibilidad de nuestras vías fluviales reduce su valor económico, recreativo y medioambiental.
Los intereses corporativos, que buscan quitarnos el derecho a proteger nuestras vías fluviales serán confrontados, y mi oficina seguirá luchando para mantener a nuestras vías fluviales seguras para todos los neoyorquinos y fuertes para nuestra economía".
El Fiscal General presentó una moción ‘amigo-del-tribunal’ en la Corte de Apelaciones de EE.UU. para el Distrito de Columbia el martes en defensa de las restricciones que Nueva York agregó al permiso nivel nacional expedido por la Agencia de Protección Ambiental (EPA). Estos permisos y restricciones de Nueva York, limita las especies invasoras en las aguas de lastre de los buques comerciales habitualmente descargan en los cuerpos de agua en que viajan.
Las especies invasoras - como el mejillón cebra, el gobio redondo, y la septicemia hemorrágica viral (VHS), virus, que se han introducido en las aguas de Nueva York – provocando la extinción de especies nativas, dañando la pesca comercial y recreativa. A diferencia de la contaminación química, la contaminación biológica de las especies invasoras tiende a la auto-replicación, por lo que el problema se agrava con el tiempo.
Un puñado de organismos liberados en agua nueva es capaz de reproducirse y colonizar amplias zonas de las aguas adyacentes. A través de la depredación y la competencia directa por los recursos, estos invasores resistentes degradan el hábitat, interrumpen las cadenas de alimentos, y amenazan la salud humana.
El permiso a nivel nacional de la EPA establece límites sobre el número de especies invasoras que pueden ser arrojadas con las aguas de lastre, una restricción específicamente añadida por Nueva York para asegurar las aguas del estado estén debidamente protegidas de contaminación biológica. La moción del Fiscal General sostiene que la ley federal de Agua Limpia Ley obliga a la EPA a incluir controles adicionales de los Estados a su permiso de todo el país.
En Nueva York, las especies invasoras representan una amenaza significativa para el valor ambiental, recreativo y económico en varios lugares. Por ejemplo:
Los Grandes Lagos ahora contienen más de 180 especies no nativas, como el notorio mejillón cebra y otros organismos invasores que han alterado radicalmente el ecosistema nativo. El establecimiento de especies invasoras en los Grandes Lagos ha resultado en pérdidas económicas anuales estimadas en $ 5,7 mil millones.
Más de 50 especies no nativas y 40 especies de origen desconocido han sido identificadas en el estrecho de Long Island. La presencia de estas especies puede resultar en significativos costos ecológicos, socioeconómicos y de otro tipo, incluidos los daños a la pesca comercial y recreativa que se estima contribuye en más de mil millones para las economías locales
Uno de los más valiosos recursos naturales de Nueva York - el río Hudson - está infestado con más de 100 especies no-indígenas. Se estimó en 2005 que el impacto ambiental y económico de la contaminación biológica del canal y los sistemas del río Hudson en el Estado de Nueva York es de casi $500 millones por año.
El Dr. David L. Strayer, Científico Principal en el Instituto de Estudios Ecológicos Cary, dijo, "Especies descuidadamente transportadas alrededor del mundo en el agua de lastre de los buques oceánicos ahora están en muchas de las aguas de Nueva York, incluyendo los Grandes Lagos, el Rio Hudson, y nuestras aguas costeras. Estos invasores dañan nuestros ecosistemas y nos cuestan millones de dólares cada año.
La acción por del Fiscal General de Nueva York para cerrar el ‘Agua de Lastre Expreso' es un paso importante para salvaguardar los recursos naturales de nuestro estado para las generaciones futuras e impide que se nos deje la factura por los daños causados por los invasores del futuro del agua de lastre".
Thomas Marks, Director del Concejo de Pesca Deportiva de los Grandes Lagos, dijo: "Aplaudo las acciones del Fiscal General Schneiderman de continuar la lucha legal para defender el derecho de Estado de Nueva York a establecer los límites numéricos sobre la cantidad de especies invasoras que pueden llegar con el vaciado en las aguas de lastre.
Los grandes esfuerzos relacionados con vaciados de aguas de lastre son necesarios para detener la invasión de nuestros ecosistemas acuáticos preciosos. Con acción continua del Fiscal General, Nueva York está marcando el estándar por el cual todas las aguas pueden ser protegidas”.
Adrienne Esposito, Directora Ejecutiva de la Campaña Ciudadana para el Medio Ambiente, dijo: "Aplaudimos al Fiscal General Schneiderman por la defensa de las importantes masas de Nueva York de los graves daños causados por las especies acuáticas invasoras.
Las especies invasoras en el Estrecho de Long Island, tales como ascidias, Cangrejo de la Costa Asiática y la Ostra Plana Europea está disminuyendo nuestros moluscos nativos y las poblaciones de peces, y perjudicando los muelles y cascos de los barcos. Requerir que los buques que naveguen en aguas de nuestro estado está libre de polizontes acuáticos protege la pesca nativa, importante infraestructura, y nos ahorra dinero".
David "Woody" Woodworth, Presidente de la Asociacion Southtown’s Walleye, dijo: "Es imperativo que protejamos nuestros Grandes Lagos de especies invasoras objeto arrojadas por el agua de lastre de los grandes buques comerciales.
El Fiscal General Schneiderman debe ser elogiado por sus esfuerzos en limitar el vertido de aguas de lastre, que ha aumentado considerablemente la contaminación de nuestros lagos con las especies invasoras. Nueva York y otros estados que tratan de proteger sus vías navegables deben tener el derecho a establecer controles para detener la contaminación de nuestras aguas por grandes buques que vierten el agua de lastre contaminada. "
Esta es la más reciente acción del Fiscal General para promover la salud, la seguridad y el bienestar económico de Nueva York. En enero, se presentó una demanda contra una central eléctrica con sede en Pennsylvania por violar la Ley de Aire Limpio y amenazar la calidad del aire de Nueva York.
Schneiderman también lideró una coalición de abogados generales del estado para pedir a la Cámara de Representantes de EE.UU. de mantener las regulaciones ambientales que protege a los neoyorquinos de mercurio y otras sustancias tóxicas peligrosas para la salud humana y el medio ambiente.
El caso está siendo manejado por la Fiscal Asistente Timoteo Hoffman, el científico ambiental el Dr. Raymond Vaughan y la Sub Jefa de la Oficina de Proteccion Ambiental del la Fiscalía General, Lisa Burianek, junto con la Sub Fiscal General Denise Hartman y la Consejera Especial de la Solicitadora General, Alison Nathan.
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