NUEVA YORK._ Acostumbrados, por su oficio a no pocas escenas sangrientas y horrorosas, policías de Long Island en el condado Suffolk, se llevaron la gran sorpresa del año, cuando ayer buscaban una mujer desaparecida cerca de una playa en Long Island y se encontraron con cuatro cadáveres, el de una mujer y tres hombres. Los cuerpos estaban escondidos entre matorrales cerca de la playa de Long Beach y los investigadores dijeron que el macabro hallazgo podría ser el principio del descubrimiento del que se cree es un gran cementerio que familias mafiosas de la zona, mantuvieron por décadas y en el que podrían seguir apareciendo esqueletos.
La sorpresa, se inició el sábado cuando perros amaestrados de la uniformada olfatearon los huesos y desenterraron el esqueleto de la primera de cuatro osamentas halladas en el lugar. Los especialistas en escena del crimen tuvieron que trabajar hasta altas horas de la noche de ayer lunes, en un día lluvioso y marcado por la primera nevada leve de la temporada invernal.
Los detectives excavaron entre la arena, hallando órganos de los cadáveres, cuyos muertos al parecer, fueron descuartizados por sus asesinos. Las autoridades marcaron con señales amarillas y números negros los puntos donde estaban los cadáveres. Tres de los cuerpos fueron desenterrados ayer lunes en la noche a lo largo de un tramo que une a las comunidades playeras de Oak Beach y Gilgo Beach.
Los investigadores no han ofrecido sus teorías sobre los hallazgos, pero una fuente dijo al periódico Newsday de Long Island que una de las víctimas es una mujer y todos los cuerpos estaban envueltos y cubiertos en gruesas frazadas (arpilleras). El de la mujer, fue el primer cadáver descubierto por los perros de la policía.
Los restos óseos fueron encontrados poco antes de las 3:00 de la tarde del sábado por el agente John Mallia quien amaestra al perro de nombre “Blue”. Las autoridades iniciaron la búsqueda en el área después de recibir denuncias de que una presunta prostituta – Shonnan Gilbert – de 24 años de edad y residente en New Jersey, había desaparecido desde mayo.
¿Quiénes eran los muertos, porqué sus cadáveres fueron cruelmente tirados allí y quién o quiénes son los responsables?, son parte de las preguntas que se hacen los ahora nerviosos, estresados y asustadizos vecinos del área.
Oak Beach está situada en una remota isla entre la barrera acuática que separa la Gran Bahía del Sur y el Océano Atlántico y es parte de una serie de áreas balnearias y recreativas a cargo del municipio.
La policía está pidiendo la colaboración de la comunidad para que la ayude a esclarecer los asesinatos, llamando al número (631) 852-6392 al Escuadrón Contra Homicidios y al (1800) 220-TIPS (Alto al Crimen).
Autor: Miguel Cruz Tejada
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