Investigación revela las acciones del “Dirtman” contaminaron la reserva de agua de Croton Falls, parte de la cuenca de Nueva York, que proporciona aproximadamente 1,2 mil millones de galones de agua potable y sin filtros a unos 9 millones de neoyorquinos cada día
El contaminador consiguió más de $300 mil en ganancias con el funcionamiento de vertederos ilegales
WHITE PLAINS – El Fiscal General Eric T. Schneiderman y el Comisionado de Departamento de Conservación del Medio Ambiente del Estado de Nueva York, Joe Martens, anunciaron hoy que un Gran Jurado ha acusado a Anthony Adinolfi (también conocido como "Dirtman" –Hombre Tierra) por la no permitida operación de dos grandes vertederos para materiales de construcción y escombros de demolición dentro de la Cuenca de Nueva York, que proporciona aproximadamente 1,2 millones de galones de agua potable a casi la mitad de la población del estado de Nueva York todos los días.
Desde aproximadamente enero de 2010 hasta octubre de 2011, estos vertederos ilegales, ubicados en el 737 de Croton Falls Road y 618 Barrett Hill Road, en el condado de Putnam, han estado recibiendo residuos de construcción y demolición conteniendo restos tales como cerámica, plásticos, carbón y ceniza de carbón, en violación de numerosas leyes ambientales. Algunos de estos materiales erosionados y fueron descargados en lugares cercanos a las fuentes de aguas del estado de Nueva York, incluyendo el acueducto de Croton Falls, que forma parte del suministro de agua que proporciona agua potable a los residentes de Nueva York.
"La contaminación de las fuentes acuíferas de nuestro estado mediante el vertido de residuos peligrosos en vertederos ilegales es deplorable, y esta persona tendrá que rendir cuentas por la comisión de estos graves delitos", dijo el Fiscal General Schneiderman. "Nuestra oficina seguirá enjuiciando a los criminales ambientales que ponen la salud y la seguridad de los neoyorquinos en riesgo para obtener un beneficio. No hay excusa para este tipo de mala conducta".
El Comisionado del Departamento de Conservación del Medio Ambiente del Estado de Nueva York, Joe Martens dijo: "DEC someterá enérgicamente a aquellos individuos que no respetan las leyes ambientales del estado para beneficio personal. Tirar basura ilegalmente no sólo afecta a la zona donde se vierte el material sino que también daña las vías fluviales cercanas. Las cuencas acuíferas de la ciudad de Nueva York suministran agua potable a millones de neoyorquinos. DEC no va a tolerar el depósito ilícito de materiales peligrosos en esta o en cualquiera de las cuencas hidrográficas del estado".
El Artículo 27 de la Ley de Conservación del Medio Ambiente y las normas fundamentales establecen que ninguna persona puede construir u operar una instalación de manejo de residuos sólidos sin antes obtener un permiso de DEC. El manejo de desechos sólidos también está sujeto a estrictas necesidades de funcionamiento y cercado para evitar los efectos adversos para la salud pública y el medio ambiente asociados con los desechos sólidos.
Según la acusación por felonía sometida el 29 de noviembre 2011 en la Corte de la Ciudad de Carmel Adinolfi, el acusado, acordó con los propietarios privados de las dos propiedades en la cuenca, que se encargaría hacer vertidos en su propiedad con el fin de rellenar zonas con pendiente. A través de 2010 y 2011, establece la denuncia, el acusado dispuso que cientos de camiones cargados de relleno fueran destinados a ser vertidos en estas dos propiedades - a veces de 10 a 15 camiones por día.
Muestras múltiples de análisis de la composición de los residuos tomadas de los escombros vertidos en estas dos propiedades mostró que estos contenían ceniza de carbón y escoria. Las cenizas de carbón y escoria por lo general contienen sustancias peligrosas y cancerígenas.
A pesar de que las leyes del Estado de Nueva York y reglamentos ambientales prohíben el cobro de tarifas para volcar este tipo de desechos, Adinolfi cobró a los conductores de camiones $75 por camión por los privilegios de descargar. Los registros del banco muestran que entre 2010 y 2011, Adinolfi, a través de su compañía Dirtman Enterprises Inc. ganó más de $300,000 en la operación de estos rellenos no permitidos.
El Gran Jurado formuló a Adinolfi varios cargos de delitos graves por violaciones de la Ley de de Conservación Ambiental del Estado de Nueva York ("ECL"), incluyendo ECL § 71-2703 (2) (por el funcionamiento sin permiso de una instalación de manejo de residuos sólidos, un delito grave clase "E" ) y ECL § 71-1933 (4) (a) (ii) (por provocar descargas de aguas pluviales sin un permiso, un delito grave clase "E"). Si es declarado culpable, Adinolfi podría enfrentar hasta de 1 1/3 a 4 años de prisión y cientos de miles de dólares en multas.
Adinolfi es también el acusado en una demanda civil interpuesta en la Corte Suprema, en el condado de Putnam, por el Estado en octubre de 2010, relativa a la operación ilegal de un vertedero en el 737 de Croton Falls Road. El Estado ya ha obtenido una orden judicial preliminar contra el Adinolfi y otros que les prohíbe contaminar ilegalmente la reserva acuífera de la ciudad de Nueva York en Croton Falls, que está al lado del vertedero. La demanda también busca exigir a Adinolfi y otros remover los escombros de construcción y demolición y otros residuos dispuestos allí, limpiar el sitio, y pagar multas civiles.
El caso penal está siendo procesado por el Fiscal GeneralAuxiliar Jason P. Garelick de la Unidad de Delitos Ambientales, bajo la supervisión de la Fiscal General Ejecutiva Adjunta de Justicia Criminal, Nancy Hoppock, la Jefe de la Oficina Gail Heatherly, y la subjefe de de la oficina Stephanie Swenton.
La investigación fue llevada a cabo por el Oficial de Conservación Ambiental Keith Manners y investigador Kevin Gilmartin de la División de Cumplimiento de la Ley de DEC, de la Oficina de Investigación de Delitos Ambientales, bajo la supervisión del teniente John Fitzpatrick y el capitán Rick Martin.
El Fiscal General reconoce la labor diligente de la DEC y el personal de la Fiscalía General con cuya colaboración se desarrolló el caso, sobre todo Steven Parisio, Geólogo Regional de Residuos Sólidos de DEC, y John Serrapica, Investigador Supervisor y Contador Forense de la Fiscalía General.
Los cargos son meras acusaciones y el acusado se presume inocente hasta que se demuestre su culpabilidad en un tribunal de justicia.
0 comentarios:
Publicar un comentario